Prosa Abstracta

Poemas abstractos, sentenciados a muerte,
preludio de una gran ola que se acerca,
formas distintas sin hegemonía cercana...
nada es tan bizarro como tus ojos,
nada debe arder más que un buen beso,
mis manos sobre tus nalgas, traspasando la tela
mientras le prendo fuego a todo en la habitación.

Rodando cuesta abajo,
con mucho lío en mi rostro,
en mi puerta una gran nota pegada
de papel áspero como el sol que asecha fuera,
y decidimos pegar un salto para fuera,
y sin cambio para el trago,
adoras este instante,
ahora cuesta detenerte...

Pasada las dos de la mañana,
los cigarrillos nunca se detienen,
empiezan a girar y a girar en dirección contraria al humo
mientras nadie descansa esta noche...
y ahora… que te miro
me siento tan quieto, tan tranquilo
mirando tu rostro y tus pechos, inhalando tu aroma...
descifrando la sentencia de toda tu (des)gracia,
balanceo el día
creando nuevas formas de observar un círculo perfecto
buscando cobijo dentro de tu sombra
no vendría mal la siesta por la tarde,
pero hoy... hay mas de la cuenta
debe cambiar.

manuel castillo l.